sábado, 13 de junio de 2009

Detrás del espejo.


Mi jirafa azul
se fue de paseo
y cayó confiada
detrás del espejo.

Se quedó atrapada
con su largo cuello
metido en un hueco
detrás del espejo.

Ruédate un poquito,
no alcanzan mis dedos,
mi brazo no alcanza
detrás del espejo.

Mañana temprano
le diré al abuelo
que tú te caíste
detrás del espejo.

Y él, con sus anteojos
y sus dedos viejos
¡verás que te agarra
detrás del espejo!



2 comentarios:

judith dijo...

de todas las poesias infantiles que lei, esta me encanto. Es de lo mas tierna y dulce, especial para los chiquitos de 2.

judith

Susana del Rosal dijo...

Hola amiga. Debe ser porque es casi una historia real. La jirafita existe. O existió. Se perdió un día y presumo que se fue detrás del espejo a un mundo mágico a buscar otros niños chiquitos para jugar, al crecer mis hijas. Un beso.